Uno de los sitios favoritos de la Costa del Sol son las playas de Marbella. Con más de treinta kilómetros de costa, esta ciudad costera tiene opciones para todos las preferencias. Desde playas de piedra hasta de finas arenas, concurridas y desérticas, y las ideales para realizar deportes acuáticos o estar de jolgorio.
Guadalmina es la primer playa de la ciudad, viniendo desde el oeste. Esta se encuentra en la urbanización del mismo nombre, es de piedra y oscura arena y es poco concurrida por los turistas. Con un gran número de servicios, es ideal para el descanso y las almas solitarias.
San Pedro de Alcántara también cuenta con su playada, rodeada de chiringuitos donde pasar una jornada de sol al ritmo de la música y probando unos buenos tacos. Además cuenta con duchas y servicio de aparcamiento.
Continuando hacia el este es posible visitar la famosa playa de Puerto Banús, mucho más concurridas que las anteriores. Esta es elegida principalmente por su gran cantidad de ofertas en el área de los deportes acuáticos, pudiendo arrendar allí mismo motos de agua, kayaks o hidropedales.
Cerca del casco urbano de Marbella se encuentran La Fontanilla, Playa Faro, Venus y El Pinillo. A todas ellas es posible acceder a pie desde el centro y cuentan con todos los servicios requeridos por los turistas para pasar una agradable jornada de sol y mar.
Ya hacia el oriente es posible visitar la Playa de Monteros, más alejada de las céntricas playas de Marbella y con arenas más claras. En esta se practican actividades como el windsurf, hidropedales o kayak, contando además con duchas, servicios públicos, hamacas y sombrillas de alquiler.
Las más alejadas del núcleo urbano de Marbella son las playas de Las Chapas, Artola, Cabopino y Calahonda. Esta última es la única playa nudista del municipio.
En general todas las playas de Marbella cuentan con todos los servicios y asistencia al visitante, principalmente en época estival.
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